UNA NIÑA: El debate sobre la discriminación sucesoria, encima de la mesa
La Constitución española dice así:
TÍTULO II
Artículo 57.1
- "La Corona de España es hereditaria en los sucesores de S. M. Don Juan Carlos I de Borbón, legítimo heredero de la dinastía histórica. La sucesión en el trono seguirá el orden regular de primogenitura y representación, siendo preferida siempre la línea anterior a las posteriores; en la misma línea, el grado más próximo al más remoto; en el mismo grado, el varón a la mujer, y en el mismo sexo, la persona de más edad a la de menos".
Desde el momento en el que se anunció el compromiso de boda entre el Príncipe Felipe y Letizia Ortiz, el debate sobre la sucesión quedó abierto. Cuando se confirmó el embarazo de la Princesa se puso encima de la mesa. Desde la propia Casa Real se lanzó un mensaje: sea lo que sea, no hay prisa. Sin embargo, acabar con la discriminación para que una mujer herede el trono supone reformar la Constitución, es decir, disolución de Cámaras y convocatoria de elecciones generales. Ha nacido la primogénita y el debate se coloca encima de la mesa. Sin embargo, si repasamos declaraciones recientes, no parece preocupar demasiado.
Hace pocos meses, tanto el Príncipe Felipe como el Rey Juan Carlos restaron importancia al asunto porque hay heredero para el siguiente paso sucesorio: "No hay urgencia, porque hay una generación por medio", dijo el Príncipe de Asturias junto a su esposa cuando ambos, hace meses, aseguraban que les daba igual el sexo del bebé.
En la misma línea se pronunciaron los Reyes. Don Juan Carlos afirmó, sobre la noticia del embarazo de la Princesa Letizia, y entre sonrisas, que "ya era hora" y a la pregunta sobre sí prefería un nieto o una nieta, el monarca ha dicho que "el heredero es el padre" y "da lo mismo" que "sea niño o niña".
Sobre la modificación de la Constitución para que pueda reinar tanto un hombre como una mujer, también han hablado, desde que se conoció el embarazo de la Princesa, los líderes políticos. El secretario de Organización del PSOE, José Blanco, dijo que su partido baraja el "calendario previsto por el Gobierno" para hacerlo. Aclaró que aún "no se ha planteado el debate" sobre si es necesario anticipar su reforma para garantizar la igualdad en el acceso a la Jefatura del Estado. Concretó que dicha reforma "no es un tema simple, ya que exige una serie de trámites", como la disolución de las Cámaras y la convocatoria de nuevas elecciones.
Desde el PP, su secretario general, Ángel Acebes, aseguró que su partido apoya la reforma de la Constitución, pero matizó que corresponde al Gobierno decir de qué manera y establecer los plazos para abordar este asunto, que requiere el "mayor consenso". Meses después, el portavoz parlamentario Eduardo Zaplana manifestó que debería hacerse "lo antes posible", y que "probablemente" debería abordarse "por separado". Zaplana subrayó que la reforma hay que afrontarla "por consenso, con la menor polémica posible" y dentro de los "criterios de oportunidad", e insistió en que, si se cumplieran esas condiciones, "lo haría en el espacio más breve posible".
Para el presidente del Consejo de Estado, Francisco Rubio Llorente, "no es necesario en absoluto adelantar nada" y consideró que los cambios en la Constitución para permitir el acceso de la mujer a la Corona se le aplicarían al futuro hijo de los príncipes "aunque fuera niña y naciese antes de que la reforma se efectuase". Es decir, sería retroactivo, aspecto en el que no todos los juristas están de acuerdo.
Rubio Llorente descartó cualquier vía distinta a la del artículo 168 de la Constitución para reformar esta cuestión y, en concreto, que se pudiera hacer mediante una Ley orgánica, ya que se trata de "una cosa muy importante".
El presidente de la Xunta, Manuel Fraga, uno de los padres de la Constitución, dijo que no cree que la reforma de la Carta Magna, en lo que se refiere a la Corona, afecte al Príncipe de Asturias, ni a la primera generación después de él.
El ministro del Interior, José Antonio Alonso, dijo que se reformará la Constitución, como ya tenía previsto el Gobierno, con todas las garantías para que no se produzca ningún problema en la sucesión al trono en la Corona Española. El ministro de Defensa, José Bono, se inclinó por reformar el artículo de la Constitución que regula la sucesión a la Corona "antes de que se produzca el segundo embarazo si lo primero que nace es una niña".
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