ABC
Su Majestad el Rey evoluciona de forma «altamente satisfactoria» tras la operación a la que fue sometido el pasado sábado en la que se le extirpó un nódulo benigno en el pulmón derecho. Don Juan Carlos se levantó ayer de la cama e incluso dio un pequeño paseo por la planta séptima del hospital. Toleró perfectamente una dieta normal y dedicó gran parte del tiempo a hacer terapia respiratoria, de modo que estuvo inflando globos para recuperar, cuanto antes, la capacidad pulmonar.
También aprovechó para ver por televisión el Gran Premio de Fórmula 1 de Montmeló y recibió la visita de la Reina, los Príncipes de Asturias, la Infanta Doña Elena, el presidente del Gobierno y el presidente de la Generalitat. Hoy se espera que acuda al Clínic de Barcelona la Infanta Doña Cristina, procedente de Washington, ciudad en la que reside. La Duquesa de Palma ya tenía previsto desde hace tiempo trasladarse hoy a España, pues mañana tiene programada una visita a la Catedral de Santiago de Compostela para obtener el Jubileo, algo que el jueves harán los Príncipes.
La visita de los Príncipes
«Como ves, aquí estoy: entero y en forma», dijo el Rey a Don Felipe en cuanto le vio entrar en su habitación. El Príncipe acababa de regresar de Costa Rica, donde representó a España en la toma de posesión de la nueva presidenta, Laura Chinchilla, y aprovechó la visita para hacer llegar al Rey las numerosas muestras de afecto y cariño que le habían transmitido los líderes iberoamericanos que acudieron a la investidura.
También otros enfermos que se encuentran ingresados en el mismo hospital enviaron ayer a Don Juan Carlos cartas y tarjetas de ánimo, según informa Europa Press, e, incluso, uno de ellos le hizo llegar un pequeño ramo de flores, que hizo mucha ilusión al Monarca.
Lo antes posible
El deseo del Rey es incorporarse lo antes posible a la actividad. De hecho, ayer mantuvo «casi un despacho» con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, con quien abordó varios asuntos de Estado en la habitación del hospital. El propio Zapatero encontró tan bien al Rey que dio por hecho que podrá participar la próxima semana en la Cumbre de la Unión Europea, América Latina y el Caribe que se celebrará en Madrid. Sin embargo, aún es pronto para asegurar la presencia de Don Juan Carlos en un acto de esas características, sólo diez días después de la intervención que se le practicó.
Si su evolución postoperatoria lo permitiera y los médicos no se lo desaconsejaran, a Don Juan Carlos le gustaría poder asistir a la cena que tenía previsto ofrecer en el Palacio Real y en compañía de la Reina el lunes 17 de mayo a los jefes de Estado que asistan a la Cumbre de la Unión Europea, América Latina y el Caribe.
Un formato largo y cansado
Sin embargo, el formato habitual de estos actos parece demasiado largo y cansado para una persona aún convaleciente, ya que incluye un largo saludo durante el cual la Familia Real permanece de pie, un discurso del Rey, la cena y corrillos de sobremesa. Si los médicos desaconsejaran la presencia de Don Juan Carlos en la cena, podrían presidirla la Reina o los Príncipes de Asturias.
De momento, el Rey se está recuperando «a buen ritmo» porque es «un buen paciente», según manifestaron Don Felipe y Doña Letizia tras visitarle. Los Príncipes dijeron estar «contentos y felices» por la recuperación de Don Juan Carlos y, en unas breves declaraciones a la Prensa, el Príncipe dijo que su padre ya ingiere comida y que se ha levantado «un poco» de la cama.
La llegada de los Príncipes, veinte minutos después de las cinco de la tarde, coincidió con la hora de visita de los familiares de los pacientes que, como el Rey, se encuentran ingresados en el Hospital Clínic. Esa circunstancia, y el hecho de ser domingo, contribuyó a que en el cruce de las calles Rosselló y Villarroel, donde se encuentra la puerta principal del hospital, se congregaran cientos de personas para ver a los miembros de la Familia Real y el resto de personalidades que acudían a visitar al Jefe del Estado.
Quienes se llevaron el recibimiento más caluroso fueron con diferencia los Príncipes. Conduciendo desde el Aeropuerto de El Prat su propio vehículo y en compañía de Doña Letizia, que calzaba unas bailarinas, Don Felipe y la Princesa fueron recibidos entre aplausos y gritos en catalán de «Visca els Prínceps». Tras saludar a las personas congregadas y posar ante los medios de comunicación, los Príncipes subieron a la remodelada séptima planta del Clínic para visitar a Don Juan Carlos, donde permanecieron más de hora y media.
También aprovechó para ver por televisión el Gran Premio de Fórmula 1 de Montmeló y recibió la visita de la Reina, los Príncipes de Asturias, la Infanta Doña Elena, el presidente del Gobierno y el presidente de la Generalitat. Hoy se espera que acuda al Clínic de Barcelona la Infanta Doña Cristina, procedente de Washington, ciudad en la que reside. La Duquesa de Palma ya tenía previsto desde hace tiempo trasladarse hoy a España, pues mañana tiene programada una visita a la Catedral de Santiago de Compostela para obtener el Jubileo, algo que el jueves harán los Príncipes.
La visita de los Príncipes
«Como ves, aquí estoy: entero y en forma», dijo el Rey a Don Felipe en cuanto le vio entrar en su habitación. El Príncipe acababa de regresar de Costa Rica, donde representó a España en la toma de posesión de la nueva presidenta, Laura Chinchilla, y aprovechó la visita para hacer llegar al Rey las numerosas muestras de afecto y cariño que le habían transmitido los líderes iberoamericanos que acudieron a la investidura.
También otros enfermos que se encuentran ingresados en el mismo hospital enviaron ayer a Don Juan Carlos cartas y tarjetas de ánimo, según informa Europa Press, e, incluso, uno de ellos le hizo llegar un pequeño ramo de flores, que hizo mucha ilusión al Monarca.
Lo antes posible
El deseo del Rey es incorporarse lo antes posible a la actividad. De hecho, ayer mantuvo «casi un despacho» con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, con quien abordó varios asuntos de Estado en la habitación del hospital. El propio Zapatero encontró tan bien al Rey que dio por hecho que podrá participar la próxima semana en la Cumbre de la Unión Europea, América Latina y el Caribe que se celebrará en Madrid. Sin embargo, aún es pronto para asegurar la presencia de Don Juan Carlos en un acto de esas características, sólo diez días después de la intervención que se le practicó.
Si su evolución postoperatoria lo permitiera y los médicos no se lo desaconsejaran, a Don Juan Carlos le gustaría poder asistir a la cena que tenía previsto ofrecer en el Palacio Real y en compañía de la Reina el lunes 17 de mayo a los jefes de Estado que asistan a la Cumbre de la Unión Europea, América Latina y el Caribe.
Un formato largo y cansado
Sin embargo, el formato habitual de estos actos parece demasiado largo y cansado para una persona aún convaleciente, ya que incluye un largo saludo durante el cual la Familia Real permanece de pie, un discurso del Rey, la cena y corrillos de sobremesa. Si los médicos desaconsejaran la presencia de Don Juan Carlos en la cena, podrían presidirla la Reina o los Príncipes de Asturias.
De momento, el Rey se está recuperando «a buen ritmo» porque es «un buen paciente», según manifestaron Don Felipe y Doña Letizia tras visitarle. Los Príncipes dijeron estar «contentos y felices» por la recuperación de Don Juan Carlos y, en unas breves declaraciones a la Prensa, el Príncipe dijo que su padre ya ingiere comida y que se ha levantado «un poco» de la cama.
La llegada de los Príncipes, veinte minutos después de las cinco de la tarde, coincidió con la hora de visita de los familiares de los pacientes que, como el Rey, se encuentran ingresados en el Hospital Clínic. Esa circunstancia, y el hecho de ser domingo, contribuyó a que en el cruce de las calles Rosselló y Villarroel, donde se encuentra la puerta principal del hospital, se congregaran cientos de personas para ver a los miembros de la Familia Real y el resto de personalidades que acudían a visitar al Jefe del Estado.
Quienes se llevaron el recibimiento más caluroso fueron con diferencia los Príncipes. Conduciendo desde el Aeropuerto de El Prat su propio vehículo y en compañía de Doña Letizia, que calzaba unas bailarinas, Don Felipe y la Princesa fueron recibidos entre aplausos y gritos en catalán de «Visca els Prínceps». Tras saludar a las personas congregadas y posar ante los medios de comunicación, los Príncipes subieron a la remodelada séptima planta del Clínic para visitar a Don Juan Carlos, donde permanecieron más de hora y media.
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