Así será la Boda Real en el Gran Ducado de Luxemburgo

Tres semanas. Ese es el tiempo que queda para que Guillermo de Luxemburgo despose a su prometida, Stéphanie de Lannoy. El Heredero empieza así una nueva y trascendental etapa en su vida; por eso, los Grandes Duques tienen previstos tres días de celebraciones en las que compartirán, tanto con miembros de otras Casas Reales como con su pueblo, su alegría.

Los Príncipes de Asturias, Don Felipe y Doña Letizia, ya han confirmado su presencia en representación de la Casa Real española a las celebraciones, que comenzarán el viernes 19. Ese día, Guillermo de Luxemburgo y Stéphanie de Lannoy se casarán de manera civil. Será a las tres y media de la tarde y, aunque la ceremonia no va a ser retransmitida, todos los luxemburgueses están invitados a presenciar la procesión de los ya esposos por las calles de la ciudad. Esa misma noche, los Grandes Duques ofrecerán una cena de gala, como es tradicional en las distintas bodas reales, para recibir a sus invitados.

El sábado 20, a las 11 de la mañana, la catedral de Nuestra Señora de Luxemburgo abrirá sus puertas para recibir a la futura Gran Duquesa en una ceremonia religiosa de la que Guillermo y Stéphanie saldrán convertidos en marido y mujer. Los invitados al sacramento disfrutarán de un almuerzo en el Palacio Ducal y, a partir de las seis de la tarde, la ciudad se llenará de distintas actividades musicales.

Los recién casados se unirán al pueblo a las ocho de la tarde para presenciar un espectáculo de fuegos artificiales en su honor y disfrutarán de una fiesta hasta la madrugada.

Todas estas celebraciones costarán al Estado 350.000 euros, un monto que en su mayoría, según el Ministro del Estado luxemburgués, «correrá a cargo de la propia Casa Ducal».